LA METÁFORA
COMO MODELO
Rosy León
San Joaquín
de Turmero, Enero, 2012
Ahondar sobre la vida y obra de Paul Ricoeur (1913-2005), constituye una gran aventura, la cual se desarrollará en tres momentos: el contexto, el texto y el comentario del texto; que en éste caso
se corresponde a la teoría de la metáfora de Paul Ricoeur y el modelo que el autor propone en “la
Metáfora como Modelo”, el cual está
inspirado en la filosofía del lenguaje.
En atención a los expertos citados en la
presente investigación, se inicia con el contexto en el que se desarrolla la
obra de Ricoeur. La trayectoria filosófica de Paul Ricoeur, se desenvuelve durante la I y II Guerra Mundial, donde su
obra enfatiza en el campo de la filosofía del lenguaje que él mismo ha creado.
Paul
Ricoeur,
fue un filósofo postestructuralista, que sigue los retos planteado por Michael Foucault (1926-1984) y Jacque Derrida (1930-2004), quienes
rechazaban que se les tildarán de postestructurlistas y postmodernistas, y en
su defecto, preferían ser llamados críticos históricos de la modernidad. Paul Ricoeur, justifica la filosofía
como la base de toda disciplina, es decir, el soporte indiscutible de la interdisciplinaridad.
Chinchilla (2005), describe a Paul Ricoeur, como un filósofo, historiador,
epistemólogo, traductor y exegeta de la Biblia, de origen francés, nacido el 27
de febrero de 1913 en Valence, huérfano
de padres, fue educado por sus abuelos junto a su hermana; Falleció el 20 de
mayo de 2005, en la ciudad de Chatanay
Malabry en las afueras de París.
Según Vergara (2006), en 1935 Ricoeur, se graduó en la Universidad de
París, en Rennes al noroeste de
Francia, obteniendo el título de Licenciado en Filosofía, trabajando como
profesor en educación media. Chinchilla (ob.cit.), asegura que en 1939 Ricoeur,
fue prisionero de guerra en Polonia y en Alemania durante cuatro años, y
mientras estaba en prisión aprovecho el tiempo para traducir las obras de Edmund
Husserl (1859-1938), mejor conocido como el Padre de la Fenomenología,
entendida ésta por Husserl (2006:10), como “una
ciencia de esencias que pretende llegar sólo a conocimientos esenciales y no
fijar, en absoluto, hechos”, es decir, que la fenomenología se ocupa de la
conciencia con todas las formas de vivencias, actos y correlatos de los mismos.
Según San Martín (1987), la
fenomenología de Husserl, era un tipo de pensamiento crítico, que analiza y
revisa a profundidad palabras y conceptos, dejando en evidencia la capacidad
limitada de la filosofía para sentar las bases de su poder analítico.
Afirman los expertos citados, que en
1948, Ricoeur se desempeñó como profesor
de la Cátedra de Filosofía en la Universidad de Estrasburgo; fue allí donde,
según Valdés (2000:X), se desarrolla el pensamiento filosófico, el cual Valdés
(ob.cit.), denominó como una “filosofía extensa del lenguaje” que lo va a
destacar en su desempeño a través de 2 características que en lo adelante, lo
identificarán seriamente apegado al racionalismo, además de la concentración en
diferente dimensiones afectiva y evolutiva del ser humano. Entendiendo al racionalismo definido en Abbagnano (2004), como el
sistema de pensamiento que acentúa el papel de la razón en la adquisición del
conocimiento.
En 1949 Ricoeur, sostiene Chinchilla (ob.cit.), publicó sus primeros ensayos de historia; sin
embargo, Valdés (2000), opina que el camino que sigue Ricoeur en el desarrollo de sus obras, constituirá la base del postestructuralismo.
Así en el texto “Le Volontaire et
l’Involontaire” (1950), Ricoeur
se dedica aplicar el método husserliano, agregándole un ingrediente nuevo, el
cuerpo, es decir, Ricoeur se dedica a
estudiar la relación afectiva y evolutiva del hombre a través de su conciencia
empleando como medio el cuerpo humano. Con ese toque personal que dio Ricoeur al método de Husserl, reconoció en dicha obra, la
necesidad tomar un desvío a través las ciencias sociales. En otras palabras, Ricoeur mostró profundo interés por
conocer lo que el hombre piensa y siente y lo qué hay entre él y su entorno en
el desarrollo de su existencia.
Ricoeur, expone Chinchilla
(ob.cit.), que a su regreso a Francia en 1956, consigue la cátedra de Filosofía
en la Sorbona de París, y nueve años
después, en 1965, decide aceptar el cargo de profesor de Filosofía en la
Universidad de Nanterre en París; luego
en 1969, es nombrado Decano de la Universidad, donde es agredido por los estudiantes,
a los que él defiende de la policía, hecho que lo impulsó a presentar su
renuncia al año siguiente.
Es importante destacar que siendo
profesor en universidades norteamericanas desde 1954, explica Chinchilla
(ob.cit.), Ricoeur se convierte en
mediador entre las dos costas del Atlántico. Y en ese largo transitar, tuvo por
hitos primeramente a Jaspers y Marcel, y después a Husserl y Heidegger, deteniéndose para
prestar particular atención a la fenomenología y la hermenéutica; pues se
encuentra inspirado en el contexto por el cual transita su vida, se dedica a meditar sobre la memoria y la fidelidad, ideas
conflictivas y presentes en un país (Francia) en la que la extrema derecha
niega la realidad de los campos de exterminio nazi, mientras que la extrema izquierda, a través de una
corriente judía, sostiene la imposibilidad de discutir el Holocausto.
Presenciando de éste modo, la imposibilidad de volver a vivir en la Francia
gloriosa.
A comienzos de los años sesenta del
siglo XX, expresa el autor (ob.cit.), Ricoeur
debate con Claude Lévi-Strauss,
destacándose así, en el panorama intelectual europeo y mundial como un gran
humanista que cuestiona la voluntaria deshumanización de Lévi-Strauss y el estructuralismo en general, admitiendo que su
rigor científico no conlleva la incompatibilidad por mantenerse en sus
criterios morales y políticos.
En 1960, dice Valdés (ob.cit.), Ricoeur publica su libro “Finitude et culpabilité”, obra en la
que Ricoeur manifiesta abiertamente
su separación de la fenomenología de Husserl, orientando su atención hacia la
filosofía del lenguaje y la hermenéutica (interpretación). Decisión que lo
inspiró para escribir en 1965 su obra titulada “Del’ interprétation. Essais sur Freud”; donde presenta, en la
introducción del texto, la naciente teoría de la hermenéutica, la cual
desarrollará paulatinamente a través de diversos ensayos que publicará en 1969
en el volumen denominado “Leconflit des
interprétations. Essais d´herméedneutique”
Para finales de los 60 e inicios de
los 70, la hermenéutica se ha desarrollado plenamente, razón por la cual fue
aplicada en contextos muy puntuales a ella. Es en 1971, cuando Ricoeur lee la Conferencia “From Existentialism to the Philosophy of
Lenguage” afirmando con ello que ya se encontraba metido en la nueva
hermenéutica.
Así, la hermenéutica de estos nuevos
tiempos, entre los años sesenta y setenta está dirigida, según lo expresa
Valdés (ob.cit.), al encuentro entre el texto y el lector, lo que revela la
acción. Hecho que emplazó a Ricoeur a
establecerse a nuevos retos principalmente con los filósofo contemporáneos
postestructuralistas. Esta situación hizo que Ricoeur se preocupara por responder a la hermenéutica
posestructuralista de Derrida y Foulcaut,
cuando decide escribir los 3 libros claves en el postestructuralismo: “La Metaphore Vive” escrita en 1975,
“Interpretati Theory” en 1976, y “Temps
el réctil” libro que inició en 1983 y lo culminó en 1985.
En la obra “La Metaphore Vive” Ricoeur,
deja expuesta su idea central que va desde la retórica a lo semántico es decir,
cuando la palabra es desplazada por la oración dejando a la luz la composición
de un predicado impertinente finalizando en lo hermenéutico. Ricoeur y Derrida se caracterizaron por ser los primeros en negar la
referencialidad del discurso poético.
No obstante, y retomando el desarrollo
curricular de Ricoeur, destaca Vergara
(ob.cit.), que entre 1970 y 1983, Ricoeur
se desempeñó como docente en la Cátedra de Teología Filosófica en la
Universidad de Chicago, en los Estados Unidos, destacándose como
socialdemócrata en las revistas cristianas de izquierda “Esprit”, revista que se
distinguía por ser la verdadera tribuna del existencialismo cristiano, y “Le Christianisme social”.
Es por ello que Chinchilla (ob.cit.),
afirma que Ricoeur, se dio a conocer mundialmente
como una autoridad en el ámbito de la filosofía de la historia, de la teoría
literaria y de la exégesis bíblica. E intelectualmente, participó en los más
grandes y mejores debates de la posguerra sobre lingüística, psicoanálisis, estructuralismo
y hermenéutica, con un interés muy personal y particular sobre los textos
sagrados del cristianismo, en el que se dedica a interpretar los textos
bíblicos.
Entre las principales obras de Ricoeur, que según Chinchilla (b.cit.), marcaron
toda una generación de filósofos franceses destacan «Historia y verdad» escrita en 1955, «Tiempo y relato» en 1983,
«Sí mismo como otro» en 1990 y «La memoria, la historia y el olvido» escrita 5
años antes de su muerte.
Expone Vergara (ob.cit.), que Ricoeur, es autor de 30 libros y 700
ensayos aproximadamente, lo que le permitió destacarse en 30 designaciones como
Doctor honoris causa y 10 premios de
prestigio universal que lo condujeron a formar parte de 7 academias nacionales
recibiendo en 1999 el premio Balzan, el cual se otorga a científicos
reconocidos a nivel mundial por destacarse en grandes contribuciones en las
Ciencias y las Artes, según lo revela la fundazione
Internazionale Premio Balzan (2011), que
traducido significa Fundación Internacional al Premio Balzan.
2. El texto:
Marié France
Begué, realizó un análisis de la obra de Ricoeur en su libro titulado "Paul Ricoeur: La Poética del sí-mismo”. Antes de iniciar
el contenido del libro, es pertinente comentar brevemente la
trayectoria de Marié France Begué. El blog colombiano Fondo Ricoeur, denominado “A un lustro de la partida de Paul Ricoeur”,
comenta rápidamente el camino realizado por
Marié France Begué. Inicia por decir que Begué, egresó de la Universidad del Salvador en Argentina con
Doctorado en Filosofía; se ha destacado por sus investigaciones de la obra de Paul Ricoeur; actualmente, pertenece al
Centro de Estudios Filosóficos Eugenio Pucciarelli,
de la Academia de Ciencias de Buenos
Aires.
Sus investigaciones se
han orientado a “La noción de “excelencia” en la obra de Paul Ricoeur”. Es miembro fundadora de la Asociación Argentina de
Fenomenología y Hermenéutica y miembro fundadora del Circulo Latinoamericano de
Fenomenología (CLAFEN). También es representante del Fonds Ricoeur para América Latina, además ha publicado artículos
dedicados al pensamiento de Ricoeur,
ejemplo de ello el último libro titulado "Paul Ricoeur: La Poética del
sí-mismo”, del cual se hará referencia a uno de sus artículos en el presente
informe. En la actualidad prepara un texto que contiene aportes contemporáneos
para una antropología filosófica.
Entrando en tema Begué (2003), realizó un análisis de las
obras de Paul Ricoeur, y lo expresó
en el texto que lleva por título "Paul Ricoeur: La Poética del sí-mismo”. En
él expone las diferentes etapas de la transición investigativa y filosófica de Ricoeur que va desde la fenomenología a
la hermenéutica interpretativa, dándole importancia al funcionamiento del
lenguaje incorporando en su estudio la cuestión de a innovación semántica, es
decir, todo lo que tiene que ver con la creación de sentido en y por el
lenguaje.
Comenta Begué (ob.cit.), que ese hecho de
incorporar la innovación semántica en su filosofía conduce a Ricouer a ejecutar trabajos de modo
alternativo entre la metáfora viva y el relato. De ahí su inclinación por el
estudio de una teoría general de la metáfora, porque considera que le permite abarcar
el campo de la producción de sentido, en el plano del lenguaje, así como
también se interesa por la función narrativa, ya que Ricoeur considera que la narrativa le permite reagrupar diferentes
actividades del lenguaje como: el relato en la conversación, la ficción literaria
y la historiografía.
Begué
divide
su libro en cinco Partes, y cada parte se estructura en capítulos. Las partes
las determina de la siguiente manera:
I.
Bases
de la Creatividad que Fundan la Poética
II.
El
Acto Creativo
III.
La
Poética de Sí Mismo
IV.
Acerca
de la Persona; y
V.
Testimonio
y Atestación
En la primera Parte, Bogué, lo dedica al poder de la
imaginación, como la teoría que abre camino
la teoría de las acciones de base y a la hermenéutica. En la Segunda
Parte, desarrolla de forma paralela lo concerniente al acto creativo a través
de los siguientes criterios: lenguaje, acción, narración e imputación moral. En
la Tercera Parte, destaca el tema de la identidad narrativa desde la
interpretación poética articulando la práctica del relato hacia el tiempo, la
historia y la ficción. Así la identidad personal se bifurca en la productividad
poética de la permanencia y la modalidad narrativa del “yo puedo”. La Cuarta
Parte y Quinta Parte la desarrollar Begué
hacia el enfoque de la existencia de la persona y la afirmación del sí,
respecto a la aceptación del ser como acto y como potencia en los campos
jurídico, histórico, ético y profético.
3. Comentario del texto:
Analizado de modo
particular el artículo “La metáforas como modelo”, contenida en el libro de Begué (2003), titulado "Paul
Ricoeur: La Poética del sí-mismo”, se aprecia que Ricoeur, asume el modelo de la metáfora para desarrollar sus
escritos, pues cree que al emplear éste, se está utilizando un valioso
instrumento que permite alcanzar claramente al proceso creativo del hombre y
además captar el proceso dinámico que le es propio a la imaginación .
Siendo
Ricoeur un
filósofo postestructuralista que ha seguido las pautas de Michel Foucault y Jaques Derrida, se diferencias de éstos,
porque no confiere permisos a nada que no sea el desarrollo cuidadoso,
riguroso, estricto y consecutivo de la explicación de un contenido a lo largo
de otros argumentos plasmando en su escritura la importancia de la explicación
de los hechos que dieron origen a ese argumento determinado; Ricoeur, estudia los textos escritos a
través de los cuales reconstruye con gran precisión el sentido original del
contenido; de ahí que el racionalismo postmoderno que ofrece Ricoeur, es hermenéutico antes que
absoluto en su reconstitución de la realidad.
Ricoeur sostiene que la relación
del modelo con el lenguaje poético es análogo a la relación del modelo con el lenguaje científico. Para
éste filósofo tanto la metáfora como el modelo son instrumentos heurísticos
porque buscan refutar una interpretación inadecuada de la realidad para abrir
brecha a una interpretación nueva y ajustada al contexto. Es decir, modelo metáfora son instrumentos de redescripción
empleadas en una teoría.
A fin de entender un poco
más lo que Ricoeur desea plantear, se
recurre a investigar a Popper (1962), quien define el término teoría:
Una interpretación del
mundo de lo real, nunca es una descripción exacta de lo que pasa en el mundo,
sino una recreación, no se apega a la apariencia para tratar de restituir su
textura exterior, sino que tiene a descubrir el sentido
Es decir, las teorías son
construcciones racionales de una realidad que apunta a una representación del
fenómeno que hace que la teoría sea
cambiante o provisionalmente, o incluso sea posible encontrar otra teoría que
explique el mismo fenómeno de diferente manera, lo que hace que esta nueva
teoría pueda suplantar la existente por otra. No hay que olvidar que para que una
teoría se comporte como tal, es decir, que le permita al lector captar la
realdad por medio de concepto o ideas, ésta debe comprender leyes, hipótesis,
definiciones y en otros casos axiomas teoremas, ecuaciones, por nombrar
algunos.
En cuanto al modelo,
según Wartofky (1968), explica que éste deriva de algo que se ha tomado del texto
original, y puede ser abstracto, por ejemplo, el paradigma lingüístico de la
conjugación de un verbo. Por lo que el modelo puede ser considerado como una
descripción o representación de la realidad, que está en función de un supuesto
teórico. Esa abstracción se puede representar mediante una idealización o una
aproximación esquemática.
Por ello es que Ricoeur, toma la metáfora como un modelo
teórico que le permita llegar al modelo
creativo del hombre, de tal modo que éste pueda captar el dinamismo de la
imaginación (imagen poética), antes que el momento perceptivo. Surge así una
relación vinculante entre la teoría de la metáfora con la teoría de la
imaginación; teniendo de por medio el proceso que conlleva a la “innovación
semántica”, la cual se traduce cuando la imaginación maniobra la creación de la
nueva predicación a través del modelo que él mismo ha creado: el modelo de la
filosofía del lenguaje.
Valoración
Conclusiva
Con base al estudio realizado en este
informe, se plantean las siguientes conclusiones, respecto a Paul Ricoeur :
· Fue
un filósofo postestructuralista, que siguió los retos planteado por Foucault y Derrida, quienes rechazaban que se les tildarán de postestructurlistas
y postmodernistas, y en su defecto, preferían ser llamados críticos históricos
de la modernidad.
·
Justifica
la filosofía como la base de toda disciplina, es decir, el soporte indiscutible
de la interdisciplinaridad.
· Deja entrever que el
modelo que opera entre la teoría de la metáfora y la teoría de la imaginación
es la filosofía del lenguaje, pues en su discurso, a través de un juego de
palabras pretende interpretar un escrito (“retórica”); es decir, Ricoeur,
recurre a la “semiótica”, (la cual consiste en estudiar los signos) a través
del significado de las palabras o signos lingüísticos (semántica),
para interpretar la realidad a través de la redescripción de texto
(hermenéutica).
Ahora bien, la “Guía e
análisis”, plantea unas interrogantes que son muy puntuales, así se tiene:
REFERENCIAS
Abbagnano, N. (2004). Diccionario de Filosofía. Actualizado y
argumentado por Giovanni Fornero y otros. (4°ed.) México: Fondo de Cultura
Económica.
Begué, M.
(2003). Paul Ricoeur: La poética del
Sí-mismo. Argentina:
Biblos.
Chinchilla, M. (2005). Paul
Ricoeur. Filósofo, historiador,
epistemólogo, traductor, exegeta de la Biblia. Disponible en: http://www.mercaba.org/ARTICULOS/R/paul_ricoeur.htm
Consultado en 2012, enero, 15.
Fondo Ricoeur. A un
lustro de la partida de Paul Ricoeur [blog internet] Colombia:Fondo Ricoeur
2010 oct-[citado 2012/ene/12]. Disponible en: http://encuentropaulricoeur.blogspot.com/2010/08/marie-france-begue.html
Fundazione
Internazionale Premio Balzan (2011). Disponible en: http://www.balzan.org/ Consultado en 212,
enero 25.
González,
T. (2001). Ensayo sobre PAUL RICOEUR, La metáfora viva.
[citado
201/febrero/12]. Disponible en: http://www.um.es/sfrm/publicac/pdf_espinosa/n1_espinosa_pdf/esp_01_crit_03_pauric_tomgon.pdf
Husserl, E.
(2006). Ideas relativas a una fenomenología pura y a una
filosofía fenomenológica: Investigaciones
fenomenológicas sobre la constitución.
México: Universidad Nacional Autónoma de México.
Masiá, J. y Moratalla, T. (1998)
Lecturas de Paul Ricoeur. Madrid:
Universidad Pontificia Comillas.
Popper, K. (1962). La lógica de la Investigación Científica.
España: Editorial Tecnos
Ricoeur, P. (2001). La metáfora viva. Madrid: Ediciones Cristiandad.
Ricoeur, P. (2004). La
memoria, la historia y el olvido”. Argentina: FCE
San Martin, J. (1987) la
fenomenología de Husserl como utopía de la razón. Barcelona: Anthropo editorial del hombre.
Valdés, M., y otros. (2000). Con Paul Ricoeur: indagaciones
hermenéuticas. España: Editorial Monte Ávila.
Vergara, L. (2006). Paul Ricoeur para historiadores: un manual
de operaciones. México:
Universidad Iberoamericana, A.C.
Wartofky,
M. (1968). Introducción a la filosofía
de la ciencia. (2°ed.) Madrid: Editorial Alianza.